La libertad es algo que la mayoría de nosotros valoramos profundamente. No solo la libertad de movernos y estar donde deseamos, sino la libertad más profunda de ser quienes somos y sentir que podemos ser eso con cualquiera, especialmente con nuestros seres queridos.
Algunas personas intentan limitarnos con comentarios desfavorables, trucos mentales y chantaje emocional. A veces también, cuando nos abrimos a quienes somos de verdad, puede sorprender o confundir a otros por estar acostumbrados a cierta forma de relacionarse con nosotros e intentan controlarnos y mantenernos en su zona de confort.
Pero cuando vas caminando por la vida bajo el amor y bajo la guianza divina, todos esos trucos desaparecen tarde o temprano. Donde hay amor verdadero, hay verdadera libertad. Y hay espacio para que descubramos más de nosotros mismos dentro de nuestra relación, y compartamos esa libertad entre nosotros, sabiendo con quién elegimos compartir este vínculo especial de la vida.
Y ver a tu ser querido volar es lo más bello del mundo.
